Más de 1.000 millones de personas están en riesgo por la falta de aire acondicionado y refrigeración para mantenerse frescos y preservar alimentos y medicinas, a medida que el calentamiento de la Tierra genera temperaturas más altas, según un estudio presentado el lunes.
Una mayor demanda de electricidad para neveras, ventiladores y otros electrodomésticos se sumará al cambio climático provocado por el hombre a menos que los generadores de energía pasen de combustibles fósiles a energías más limpias, según el informe del grupo sin ánimo de lucro Energía Sostenible para Todos.
Alrededor de 1.100 millones de personas en Asia, África y América Latina – 470 millones en áreas rurales y 630 millones de zonas marginales urbanas – estaban en riesgo entre los 7.600 millones de habitantes del mundo, dijo.
“La refrigeración es cada vez más importante” con el cambio climático, dijo a Reuters Rachel Kyte, directora del grupo y representante especial del secretario general de la ONU para Energía Sostenible para Todos.
En una encuesta realizada en 52 países, los que están en mayor riesgo incluían India, China, Mozambique, Sudán, Nigeria, Brasil, Pakistán, Indonesia y Bangladesh, dijo.
“Tenemos que proporcionar refrigeración de una manera súper eficiente”, dijo Kyte. Las empresas podrían encontrar grandes mercados, por ejemplo, desarrollando aires acondicionados de bajo coste y alta eficiencia para vender a las crecientes clases medias de países tropicales.
Y soluciones más simples, como pintar los techos de blanco para reflejar la luz solar o rediseñar los edificios para permitir que salga el calor, también ayudarían.
La agencia de salud de la ONU dice que el estrés por calor asociado al cambio climático probablemente causará 38.000 muertes adicionales al año en todo el mundo entre 2030 y 2050. En una ola de calor en mayo, más de 60 personas murieron en Karachi, Pakistán, cuando la temperatura subió por encima de 40 grados Celsius.
En áreas remotas de países tropicales, muchas personas carecen de electricidad y las clínicas a menudo no pueden almacenar vacunas o medicamentos que deben enfriarse, según el estudio. Y en los barrios marginales urbanos, los suministros de electricidad a menudo son intermitentes.
Muchos agricultores o pescadores carecen por su parte de acceso a una “cadena de frío” para preservar y transportar productos a los mercados. El pescado fresco se estropea en cuestión de horas si se almacena a 30 grados Celsius, pero se mantiene en buen estado durante días cuando se enfría.
reuters